La estadía de Mariátegui en Europa (1919-1923) fue determinante y le sirvió para conocer otro tipo de experiencias (políticas, artísticas, editoriales) y para establecer una red de contactos hacia futuros proyectos. En Europa, admiró publicaciones como Clarté (fundada por Henri Barbusse), L’Ordine Nuovo (fundada por Antonio Gramsci) y La Rivoluzione Liberale (fundada por Piero Gobetti). Estos proyectos eran plataformas concebidas como foros para articular las luchas de los trabajadores y definir un nuevo proyecto de sociedad.
Mariátegui regresó al Perú en 1923 con la intención de proponer un proyecto de transformación social y cultural de gran envergadura. Pronto se unió a la Universidad Popular González Prada, donde dictó 23 conferencias abiertas al público en general1. Su interés era ilustrar los cambios políticos, económicos y culturales que estaban teniendo lugar en el mundo en ese momento. Entre ellos, Mariátegui percibió transformaciones en las tecnologías y buscó aprovecharlas al máximo, ya que creía que desde ahí se podría mejorar “el tejido nervioso de esta humanidad internacionalizada y solidaria”.(Mariátegui, J. C. (1985a). Historia de la crisis mundial. Biblioteca Amauta.).
Una de las características de nuestra época es la rapidez, la velocidad con que se propagan las ideas, con que se trasmiten las corrientes del pensamiento y la cultura. Una idea nueva, brotada en Inglaterra, no es una idea inglesa, sino el tiempo necesario para que sea impresa. Una vez lanzada al espacio por el periódico esa idea, si traduce alguna verdad universal, puede transformarse instantáneamente en una idea universal también (Mariátegui, J. C. (1985a). Historia de la crisis mundial. Biblioteca Amauta.).
Por eso, a poco tiempo de regresar a Lima, le escribió a Pedro Ruiz Bravo, director de El Tiempo, para manifestarle las razones que lo impulsaban a volver a participar en la compleja vida política nacional, pero sobre todo por su interés en adquirir este medio, en el que había trabajado antes de partir a Europa:
Piensan todos que la situación política es complicada y difícil. Y yo no lo pongo en duda. Pero a mí, precisamente, me atraen las situaciones difíciles y complicadas.
Tengo el proyecto de publicar un diario y tengo, sobre todo, los capitalistas necesarios para esta empresa. Pero encuentro preferible por varias razones —ahorro de tiempo, de esfuerzo, etc.— adquirir un diario existente. Y pienso que a Ud. tal vez le convenga enajenar sus derechos en “El Tiempo” y que, en este caso, Ud. y la empresa que represento podrían entenderse y hacer un buen negocio. (Mariátegui, J. C. (1923). Carta de José Carlos Mariátegui a Pedro Ruíz Bravo del 9 de junio de 1923. Archivo José Carlos Mariátegui. http://archivo.mariategui.org/index.php/carta-pedro-ruiz-bravo-9-6-1923)
Pese a que esta adquisición no pudo concretarse, Mariátegui no se dio por vencido. En octubre de 1925, junto con su hermano Julio César, fundó la Editorial Minerva, dedicada a la publicación y venta de libros (Pinamonti, E., Mariátegui, J. C. y Escobar, J. (2009, septiembre). Historia de la imprenta y editorial Minerva. Boletín Casa Museo José Carlos Mariátegui, 6-7.). Fue el pintor Emilio Goyburu Baca el encargado de diseñar el logotipo de esa diosa de la sabiduría, las artes y de la estrategia militar. La primera gran acción de la editorial fue la adquisición de la imprenta modelo Export 6 B, de la empresa turinesa Società Nebiolo. Podemos decir que esta máquina, —que se expone hoy de forma permanente en la Casa de la Literatura Peruana— dio un giro tecnológico en la producción del libro en el Perú y, gracias a ella, permitió iniciar un ambicioso plan de publicaciones2. En 1925, en la serie Biblioteca Moderna, Mariátegui publicó su primer libro La escena contemporánea y lanzó al mercado publicaciones de autores peruanos y extranjeros como Manuel Beingolea, José María Eguren, Alcides Espelucín, Luis Guillén, Mariano Iberico, Serafín del Mar, Antenor Orrego, Magda Portal, Luis E. Valcárcel, Máximo Gorki, entre otros.
Es claro que Minerva, gracias al gran conocimiento que Mariátegui tenía, estableció un vuelco tecnológico sin precedentes en la historia editorial peruana. Antes de ella, las condiciones materiales de impresión eran incipientes, lo que no permitía un nivel alto de calidad. Los escritores debían fungir de editores y no existía en el Perú la capacidad técnica para la producción gráfica del libro. Sin embargo, en su papel como director literario y artístico de la Editorial Minerva, Mariátegui se convirtió en un editor cuidadoso preocupandose por los detalles, desde la impresión hasta la distribución. Más allá de establecer un sólido plan de publicaciones, estuvo siempre preocupado por la composición de textos, en particular de los libros de poesía, que requerían de un cuidado especial en la edición, como el libro Poesías, de José María Eguren y, sobre todo, como los 5 metros de poemas, de Carlos Oquendo de Amat, cuya complejidad técnica requería mucha pericia debido al uso de diez tipos distintos de tipografía y un formato largo especial. (Castillo, L. A. (2019). La máquina de hacer poesía [imprenta, producción y reproducción de poesía en el Perú del siglo XX]. Meier Ramírez.)3.
El gran conocimiento editorial que Mariátegui tenía puede notarse también en la elaboración del llamado Catálogo de tipos, orlas y viñetas, donde se muestran 62 variantes de fuentes tipográficas que había adquirido en Italia tomando como referencia los estilos gráficos de las revistas de vanguardia4. Para elaborarlo, Mariátegui compuso una serie de “frases modelo” (del tipo, La vida es un Paraíso…… Perdido) en las que se aplicó las distintas fuentes y variantes tipográficas en altas y bajas, y en diferentes estilos (cursivas y negritas). Las frases, si bien tenían como función presentar la variedad de tipos, muestran sutilmente las preocupaciones políticas de la editorial:
QUEREMOS ABARATAR EL LIBRO, ES NUESTRO FIN; Nuestra Imprenta ha sido montada con especial ESMERO TECNICO; TODAS LAS PERSONAS CULTAS, y en particular los hombres de ciencia y arte, SON INVITADOS
Dicho de otra manera: la editorial no solo exhibía conocimiento y dominio técnico, sino que siempre propiciaba un ambiente intelectual que hizo posible que el trabajo sobre los aspectos materiales del libro pudiera fomentar nuevas formas de experiencia estética (Castillo, L. A. (2019). La máquina de hacer poesía [imprenta, producción y reproducción de poesía en el Perú del siglo XX]. Meier Ramírez.). De hecho, entre 1928 y 1929, seis libros de la editorial fueron premiados en concursos convocados por el Concejo Provincial de Lima: Tempestad en los Andes, de Luis E. Valcárcel (1927); Una esperanza i el mar, de Magda Portal (1927); 5 metros de poemas, de Carlos Oquendo de Amat (1927); 7 ensayos de interpretación de la realidad peruana, de José Carlos Mariátegui (1928); Historia de Jauja, de Abelardo Solís (1928); y El hombre del Ande que asesinó su esperanza. Poemas unilaterales, de José Varallanos (1928). Se tiene identificado que se publicaron cerca de 50 obras, muchas de las cuales han tenido hasta hoy una influencia central en la escena cultural del país5.
Hay que subrayar además que el objetivo de la creación de la editorial nunca fue el afán de lucro ni el enriquecimiento personal. Todo el trabajo que Mariátegui realizó a lo largo de su corta vida fue siempre propuesto como una contribución al país y no como un simple emprendimiento individualista. Mariátegui entendía que los objetos culturales, portadores de una nueva sensibilidad, debían democratizarse y ser el cimiento de la nueva sociedad. En sus palabras, se trataba de “someter” el dinero a los principios del arte y del bien común para construir una sociedad más justa y solidaria (Mariátegui, J. C. (1974b). Temas de educación. Biblioteca Amauta.). De hecho, en el Boletín Bibliográfico de la Editorial Minerva, se define el enfoque humanista y universalista de su proyecto editorial:
Se ha fundado esta editorial con el objeto de dotar a la cultura peruana de una verdadera y orgánica casa de ediciones científicas, literarias y artísticas, que acerque a los autores al público, que contribuya al intercambio intelectual hispano-americano y que difunda el libro peruano en el Perú y en el Continente. La Editorial Minerva quiere ser un hogar y un órgano de la producción científica, literaria y artística peruana. Publicará un libro mensual, elegido entre los que, originales e inéditos, reciba de escritores de la lengua y entre las traducciones especiales que encargue a sus colaboradores para revelar al público hispano-americano las más recientes producciones del pensamiento occidental. La Editorial Minerva asegurará a los autores la más extensa circulación de sus obras en el Perú, en América y en España. Sostendrá activo intercambio con las principales editoriales y librerías de las capitales ibero-americanas. Todas las personas cultas, —y en particular los hombres de ciencia y de letras—, son invitados a conceder su apoyo a este esfuerzo cultural. (Imprenta y Editorial Minerva. (1926). Presentación de la Editorial Minerva. Libros y Revistas: Bibliografía, Crítica, Noticias Literarias, Científicas y Artísticas, 1(1), 1-2. http://hemeroteca.mariategui.org/index.php/Detail/objects/54)
Notas
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Las conferencias, correspondientes a los años 1923 y 1924, fueron publicadas como parte de las obras completas de Mariátegui con el título Historia de la crisis mundial (1985a). Algunas de las notas mecanografiadas para estas conferencias se encuentran disponibles en http://archivo.mariategui.org/index.php/conferencias-2 ↩︎
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El documental Minerva: elogio de la máquina, producido en 2017 por el cineasta español Daniel Lagares, da cuenta de la historia de la máquina. Véase el reel en https://www.youtube.com/watch?v=ehJXCQ0_grs ↩︎
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Al respecto, se puede revisar la carta de José María Eguren a Mariátegui con fecha 6 de agosto de 1928 (http://archivo.mariategui.org/index.php/carta-josemaria-eguren-6-8-1928) y la carta de Mariátegui a José María Eguren con fecha 21 de noviembre de ese mismo año (http://archivo.mariategui.org/index.php/carta-a-josemaria-eguren-21-11-1928). ↩︎
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Además de máquinas de imprenta, la empresa Nebiolo creó una gran variedad de fuentes tipográficas, que siguen siendo populares hasta la actualidad. ↩︎
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El Archivo José Carlos Mariátegui ha elaborado un listado de publicaciones editadas por la Editorial Minerva entre 1925 y 1930: https://www.mariategui.org/publicaciones-de-la-editorial-minerva-1926-1930 ↩︎